La Región de Ñuble está llena de tradiciones, sus diferentes comunas tienen algo que las destaca, siempre hay algo familiar en ellas, de igual forma el rodeo es un deporte que tiene un gran arraigo familiar, que por generaciones han destacado, como dirigentes, también como deportistas y en la crianza del caballo chileno.
Los diferentes clubes que integran la Asociación de Rodeo Chileno de Ñuble son dueños de una historia diferente, pero unidos por un común denominador, la participación de padres e hijos, de hermanos y familiares cercanos, con eventos corraleros muy acampados donde prevalece y se destaca la amistad y la camaradería.
Cada fin de semana vemos en las diferentes medialunas el accionar de estas colleras que concitan la participación familiar, tal vez poco visto en otros lugares del país.
Sin duda que es una clara demostración de lo que son nuestras tradiciones, las que están relacionadas con la ruralidad, con las labores cotidianas del campo, con el caballo chileno como principal actor, tanto para las labores diarias como para la práctica del deporte.