RICHARD Y JOSÉ TOMÁS ESPINOZA: “RECIBIR POR DOS AÑOS CONSECUTIVOS ESTE PREMIO NOS TIENE TREMENDAMENTE FELIZ”

La Asociación de Rodeo Chileno Ñuble Cordillera ha desarrollado dos Cenas de Premiación desde su origen. Ambas actividades de camaradería, tanto la del cierre de la temporada 2023-2024 como la del reciente 2024-2025, convergieron en la selección del Mejor Criadero: Criadero Don Rene.

En ese sentido, Entre Quinchas conversó con Richard Espinoza y con su hijo José Tomás Espinoza, quienes se manifestaron muy contentos por este logro, un reconocimiento que recae en ellos por segundo año consecutivo.

En primer lugar, Richard Espinoza mencionó que “me emociona nuevamente, un segundo año consecutivo recibir este premio al mejor criadero. Es una emoción muy grande. No llegamos este año a Rancagua como el año pasado pero tuvimos una tremenda actuación junto a don Claudio Krause, mi compañero, que es un tremendo. Hicimos un esfuerzo para estar con él hoy día en esta temporada y logramos lo que se pudo, quisimos estar más allá pero no se pudo y así es el deporte. Estamos muy felices. Recibir por dos años consecutivos este premio me tiene tremendamente feliz“.

Por su parte, José Tomás, hijo de Richard Espinoza, señaló que “estamos feliz por este reconocimiento, es un orgullo tremendo, un orgullo para la familia, orgulloso de mi padre por lo que ha construido desde lo poco, por todo lo sacrificado que uno como hijo ni siquiera conoce pero sabe que existe. Feliz por lo grande que se hace el criadero, no grande por espacio o por lo económico, sino que grande por lo familiar y por lo bonito que hay en el cariño. Me fascina que mi padre llegue lejos, son 30 años de trayectoria, no es algo fácil, es algo sacrificado y que hoy en día se está plasmando y se están viendo todo el empeño que le ha puesto mi padre. Yo lo felicito y muy feliz por él”.

Finalmente, Richard Espinoza tuvo palabras para sus hijos y ahondó en el camino recorrido en la crianza. “La verdad es que ellos (sus hijos) están dedicados a estudiar, yo tengo un criadero muy chiquitito, de un par de yeguas y doy gracia a los consejos que me ha dado gente importante y gente grande en la trayectoria del rodeo en Chile. Doy gracias a quien me ayudo a criar estos caballos, a Fernando Pérez, que me paso su genética en su potro fiestero, a don Maucho Riquelme que me ayudó también con las madres que es la base de mi criadero y él me aconsejó y hoy día los reflejos dan frutos, o sea se reivindica lo que dije el año pasado de que hay que espera, tener paciencia y criar con gusto, cariño y paciencia”, cerró.

Comparta esta noticia