. Realmente, no existe ningún truco exacto que haga que nuestro caballo esté junto a nosotros por mucho más tiempo, ya que pueden darse un sinfín de circunstancias que terminen con un desenlace fatal. Sin embargo, si ponemos en práctica una serie de consejos sí podemos contribuir a que la esperanza de vida sea ligeramente mayor, o al menos de más calidad.
En primer lugar hay que hacer especial hincapié en la nutrición. Una correcta alimentación y una dieta equilibrada librarán al caballo de padecer muchas enfermedades y de mantenerse sano y fuerte.
La higiene es otro de los factores clave. Mantener limpios el establo y los lugares frecuentados por el caballo durante largos periodos de tiempo evitará que estos se conviertan en un potente foco de infecciones y de peligros.
Si sometemos a nuestro caballo a trabajos duros (fuertes tareas de tiro, de carga, etc.), lo castigaremos en exceso, algo que hay que evitar a toda costa si no queremos que repercuta negativamente.
A grandes rasgos, estos son los consejos básicos que pueden hacer que nuestro caballo viva algún año más, aunque no son los únicos: el ejercicio físico diario y las visitas periódicas al veterinario también pueden ser de enorme ayuda.
Relación entre los años de vida de un caballo y los años de vida de un ser humano
Si deseamos establecer una relación o paralelismo que nos permita saber a cuánto equivalen los años de vida de un caballo en comparación con los de una persona, hemos de saber que, más o menos, un año de un caballo (una vez el animal hay superado los cuatro años de edad) corresponde a dos años y medio de una persona.